Cuatro escritoras de literatura fantástica incluidas en la compilación de J. L. Borges, S. Ocampo y A. Bioy Casares
Abstract
En 1940, J.L. Borges, S. Ocampo y A. Bioy Casares publicaron su Antología de la literatura fantástica, que incluía a la francesa, Alexandra David-Néel y a la británica May Sinclair. Veinticinco años después, en 1965, prepararon una nueva edición que incluyó los textos de dos latinoamericanas, Elena Garro y Silvina Ocampo. De la mano de estas cuatro talentosas escritoras, nos hemos podido asomar a la literatura fantástica que, como sabemos, enfoca el trabajo de la escritura en el reino de lo desconocido, lo aterrador, lo misterioso y lo sobrenatural. A través de David-Néel, podemos advertir las circunstancias y enseñanzas complejas y profundas que contiene el budismo panteísta, pues responsabiliza ad aeternum, esto es, por toda la eternidad, a cada sujeto de lo que ocurra en el devenir de su existencia terrestre. En “Un hogar sólido” de Elena Garro, se muestra que, incluso después de la muerte (a partir de un lenguaje delicado y poético), algo podemos aprender de lo vivido: tanto de lo bueno, como de lo malo, y más aún, podemos sobrevivir disfrutándolo, cuando nos hacemos uno con la naturaleza. Silvina Ocampo en su texto “La expiación”, nos advierte que, hasta de manera lateral, podemos ser responsables de actos maléficos en los que podemos vernos involucrados sin advertirlo, y, por último, y no menos atroz, May Sinclair nos previene que, como consecuencia de cierta superficialidad y egoísmo en el actuar amoroso, podemos estar cavando e irnos derecho al infierno per saecula saeculorum. In 1940, J.L. Borges, S. Ocampo, and A. Bioy Casares published their Anthology of fantastic literature, which included the French author Alexandra David-Néel and the British writer May Sinclair. Twenty-five years later, in 1965, they prepared a new edition that included the texts of another two Latin Americans writers, Elena Garro and Silvina Ocampo. Hand in hand with these four talented writers, we have been able to look at fantastic literature that, as we know, focuses the work of writing in the realm of the unknown, the terrifying, the mysterious and the supernatural. Through an orientalist, we can notice the complex and profound circumstances and teachings contained in pantheistic Buddhism, since it holds that each subject is responsible ad aeternum, that is, for all eternity, for what happens in the course of their terrestrial existence. In “Un hogar sólido” by Elena Garro, it is shown that even after death, in a delicate and poetic language, we can learn something from what we have lived: both the good and the bad circumstances and that we can even survive enjoying it, when we could become one with nature. Silvina Ocampo in her text “La expiación”, warns us that, even in a lateral way, we can be responsible for evil acts in which we can be involved, and last, and not less atrocious, May Sinclair, warns us, that as a consequence, of certain superficiality and selfishness in acts of love, we may be digging our entrance to Hell per saecula saeculorum.